Bizum vino y venció
Reclutamos a un equipo multidisciplinar, en el que cada uno era de su casa (o más bien de su tribu), pero en el que todos teníamos algo en común: muchísimas ganas de hacer piña para sacar adelante uno de los servicios que más nos pedían nuestros clientes.
Un proyecto en el que usamos la arquitectura de MERAK para la creación de microservicios y en que la metodología Agile nos sirvió como guía para superar todos los retos: como el extra de organización que supuso alinearnos entre varios interlocutores, third parties y la propia complejidad de la burocracia.
Pero lo más importante llegó con el mayor de los retos. El COVID-19 transformó nuestra forma de trabajar y nos mandó a todos a nuestras improvisadas oficinas caseras, desde las cuales todo el equipo consiguió seguir adelante para que Bizum llegase a tiempo. Superando las expectativas de nuestros clientes y las nuestras.
Todo un proyectazo que consiguió batir récords en solo 24 h. Y que merece una celebración presencial que estamos seguros de que pronto llegará.